creo que a propósito del viaje, y de habitar luego ese lugar visitado, compartimos cierto 'desprendimiento', como que nunca hemos echado raíces.. Y no sé, me pongo a pensar y a pesar de haber estado en muchos lugares juntos (muchísimos más por separado), no recuerdo haber habitado un lugar específico con Lorena (excepto unos días raros en El Tabo), quizá esa es una ventaja, pues también quiere decir que no hemos sido nunca árboles (me hablabas de sociedades de árboles, recuerdas?). Quizá son nuestras cabezas las que nos dan viajes o que nos trasladan sin consentimiento.El otro día te comentaba acerca de la serie de animé Arjuna, donde dice en el 1er capítulo que hay que ser la diana y no la flecha, algo así como estar ya en el lugar de la meta, ser esa meta.. y no concentrarse en el objeto que va hacia allá, pues, con toda la conciencia puesta ya en lo buscado, te transformas en eso y no hay obstáculo alguno en el trayecto. A propósito de esto, también hay un poema de don Nicanor Parra que dice, estoy casi seguro, algo similar:
Proyecto de Tren Instantáneo entre Santiago y Puerto Montt
está en el lugar de destino (Puerto Montt)
y el último carro en el punto de partida (Santiago)
la ventaja que presenta este tipo de tren
consiste en que el viajero llega
instantáneamente a Puerto Montt en el
momento mismo de abordar el último carro
en Santiago
lo único que debe hacer a continuación
es trasladarse con sus maletas
por el interior del tren
hasta llegar al primer carro
una vez realizada esta operación
el viajero puede proceder a abandonar
el tren instantáneo
que ha permanecido inmóvil
durante todo el trayecto
Observación:
este tipo de tren (directo) sirve sólo para viajes de ida.
(esta foto es del verano del '99, mochileo con ex-compañeros del liceo, es en la antigua estación de trenes de Pto. Montt, actualmente una feria artesanal-costumbrista, de un mural que relata e ilustra el poema)